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Luego de más de 40 años en las rutas, Raúl
está en condiciones de hacer un balance sobre
su profesión al consultarle qué es lo peor y lo
mejor que tiene estar arriba del camión. “Lo
peor? Lo peor de mi profesión es tener que es-
tar muchos días fuera de la casa pero uno se
tiene que acostumbrar porque es por el bien de
la familia. Porque vos sabés que trabajés, llega
fin de mes, cobrás y tenés para comer y pa-
gar las cuentas, más que nada….. y para darme
unos gustos (se ríe)”. Por otro lado, al consultar- vechando la conversación sobre los cambios
le sobre lo que considera que es LO MEJOR de
su trabajo, no duda en respondernos que es la
oportunidad de progreso que le dio la empresa
en conjunto con el trabajo duro que realizó du-
rante décadas: “Lo mejor es que uno trabaja de
lo que le gusta. Yo me hice de chico camionero
y trabajo y ando bien porque me gusta andar
y progresé. Porque vos decís ‘yo soy camionero
y no tengo nada’ pero yo hice sacrificio y logré
hacer lo que necesitaba: comprar mi terreno y
tener mi casa. Ahora tengo un auto, no? No es
para tirar manteca al techo y darme que tengo
un techo de oro, pero tener lo necesario”.
En las décadas que trabajó Raúl, se han suscita-
do muchos avances en materia de seguridad en
el rubro. El “Flaco”, nos ilustra en detalle lo que dejar tirado en algún lado. Eso sí, le gustan las
él experimentó con su incorporación: “Antes se
viajaba sin horario, no tenías límite de veloci-
dad, viajabas vos hasta la hora que querías,
o parabas a dormir a la hora que querías y el
cambio grande que sentí fue el de la velocidad,
el régimen de 80 (km/h) y el horario de parada
a las 22 horas. Uno antes estaba acostumbrado
a parar a comer al medio día, luego dormir la
siesta para recuperarlo a la noche. Esta norma
existe desde hace 5 años, por lo menos”. Apro-
que se fueron dando en el transcurso del tiem-
po, Montes de Oca nos comenta sobre la evolu-
ción del tráfico a la fecha: “el tráfico ha crecido
y la gente está más violenta y no te respeta.
Hace 10 ó 15 años atrás, los automovilistas te
respetaban, ya no nos respetan. Y el tráfico es
cada vez peor en el sentido de hay muchos más
colectivos, camiones, autos y peatones. Antes
era más tranquilo. Si me preguntás, el parque
automotor creció 100 veces más”.
Llegando al final de la nota, Raúl hace una au-
torreflexión sobre su personalidad. De ésta for-
ma, Raúl se describe a sí mismo: “Un tipo bueno
que si te ve en las malas no te va a dejar, o te ve
en algún problema te va a ayudar. No te va a
FEBRERO - 2018